La presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo (FvT), Maite Pagazaurtundua, ha asegurado que cuando advirtió de posibles reacciones de venganza si las víctimas se sentían traicionadas quería expresar que no se valora "que las víctimas nunca se han vengado".
"En un colectivo tan amplio, no se tiene en cuenta que en el hipotético caso de una falta radical de Justicia, podría haber tentaciones de tomarse la justicia por su mano", ha asegurado Pagazaurtundua en una conferencia pronunciada en el curso de verano de la Universidad Complutense "Un final del Terrorismo sin Impunidad", organizado por la FVT.
No obstante, Pagazaurtundua ha confiado en que jamás se produzcan reacciones de "venganza" por parte de las víctimas si el final de ETA supone su "humillación" o la "impunidad" de los terroristas. En este sentido, ha rechazado de plano un final de ETA sin vencedores ni vencidos tal y como plantea el nacionalismo vasco.
"¿Se imaginan que la selección española de fútbol se hubiera planteado la final de la Eurocopa sin vencedores, ni vencidos?", ha ironizado.
La presidenta de la FvT ha afirmado que en la sociedad vasca se están dando pasos hacia la impunidad de los terroristas, así como para la imposición de un relato "exculpatorio" de todo el mundo de ETA y de Batasuna.
"Ha habido muchos pactos por debajo que han llevado a la legalización de Bildu. Si bien sigue la persecución policial, si bien el mundo de ETA es muy vulnerable y muy débil, ahora tienen una mayor posibilidad de conseguir la victoria política", ha subrayado.
Sobre esta victoria política de la izquierda abertzale, ha lamentado que Bildu tenga ahora "dinero para aburrir" gracias a su presencia en las instituciones mientras que las asociaciones de víctimas están "sin un duro". Pagazaurtunda también se ha mostrado escéptica sobre la posibilidad de que los vascos que se han visto obligados a abandonar su tierra por la amenaza de ETA puedan votar en el País Vasco, tal y como ha propuesto el Ministerio del Interior.
Según su experiencia, la mayoría de las personas que se han marchado del País Vasco sigue teniendo un "miedo atroz" y no cree que se vaya a apuntar voluntariamente en un censo de "exiliados".
"¿Ustedes se imaginan que Bildu pudiera perder unas elecciones por ese ´censito´?. No lo van a permitir. Además de que es muy difícil de articular jurídicamente", ha afirmado.
Tampoco confía demasiado en los encuentros en prisión entre víctimas y terroristas que, a su juicio, se mueven en el "idealismo moral" pero no afrontan la raíz del problema: la falta de un reproche social a ETA.