La Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC), una de las cinco que forman parte del Consejo de la Guardia Civil (el órgano en el que se debaten los asuntos de personal del Cuerpo), considera que limitar el número máximo de horas de trabajo semanales "beneficiará" a los agentes que, por estar destinados en unidades de investigación o ejercer mando, "prestaban ilimitadas horas de servicio" por no existir una regulación de la jornada laboral máxima.
Según un portavoz de AEGC consultado por ATENEA, "no es cierto" que se vaya a aumentar la jornada laboral a 48 horas. "La jornada seguirá siendo de 37 horas y media -puntualiza-, y la diferencia con la actual situación es que ahora habrá límite de horas de servicio, y antes no".
De hecho, según este portavoz, "hay compañeros de Policía Judicial" (agentes 'afectados' por la nueva regulación, porque realizan labores de investigación) "que están encantados con el establecimiento de un número máximo de horas". Hasta ahora, muchos de estos agentes "sobrepasaban" las 48 horas semanales y, en muchos casos "sin compensación económica". "Si te encuentras en un operativo -explica el portavoz de AEGC- haces horas, sin preocuparte de nada más, porque ésa es nuestra misión, servir al ciudadano".
Menos de 48 horas
No obstante, AEGC intentará que el número máximo de horas semanales sea inferior a las 48 que quiere implantar la Dirección General del Cuerpo, como así está recogido en el borrador que, el martes, durante la primera reunión del grupo de trabajo sobre 'jornadas y horarios', se entregó a los representantes asociativos que asistieron a dicha reunión.
El borrador ha suscitado las críticas de la mayor parte de los movimientos asociativos, porque contenía modificaciones (ampliación de 43 a 48 horas, por ejemplo) que no estaban reflejadas en el anterior documento que se les había entregado para su estudio. "No resulta muy ortodoxo, y no tiene mucho sentido, que nos envíen un borrador para estudiarlo y que, el día de la reunión, se debata un borrador distinto", critican desde AEGC.
Según AEGC, ante la premura por cumplir la carta de emplazamiento que la Comisión Europea remitió al Gobierno de España para que se cumpla la Directiva Europea de 2003 relativa a la ordenación del tiempo de trabajo, la Dirección General de la Guardia Civil pretende llevar a la próxima Comisión Preparatoria del Consejo esta norma, para aprobarla en el siguiente Pleno, que se celebrará, previsiblemente, entre octubre y noviembre.
"Una sola reunión resulta insuficiente"
Pero AEGC ha expresado su "discrepancia" al respecto, porque considera que "una sola reunión del grupo de trabajo resulta insuficiente para tratar todos los detalles de la modificación de la Orden General 4/2010, que actualmente regula la jornada y el horario de servicio del personal de la Guardia Civil".
Esta asociación también es partidaria, como ASES-GC (la Asociación Escala de Suboficiales de la Guardia Civil), de que las modificaciones relativas a la jornada laboral "vayan de la mano" de las reuniones que realizará el grupo de trabajo de 'productividad y sobreesfuerzos', "porque la Orden General sobre incentivos al rendimiento tiene una relación directa sobre la Orden General sobre jornada y horario de servicio".
En lo que respecta a esta última, los cambios introducidos en el borrador que se entregó a las asociaciones en la reunión del martes contemplan, también, los siguientes aspectos: la regulación del descanso diario (al menos, 11 horas consecutivas); el establecimiento de un descanso semanal en fin de semana, de cada tres fines de semana consecutivos (hasta ahora era uno de cada cuatro); o la regulación y definición del concepto de 'necesidades del servicio'.
En la actualidad, los guardias civiles tienen un horario semanal de 37 horas y media, pero no hay una normativa que limite el número de horas que pueden trabajar, como máximo, cada semana. Precisamente esa ausencia de normativa, que saltó a la luz tras la denuncia que otra asociación del Cuerpo (la Asociación Unificada de Guardias Civiles) interpuso ante la Comisión Europea sobre el incumplimiento de la Jornada Laboral en la Benemérita, provocó que Bruselas diese un toque de atención a España para que se cumpliese la Directiva Europea de 2003 relativa a la ordenación del tiempo de trabajo.